Espiritualidad

Cristocéntrica

Yo soy el Camino la verdad y la vida,
nadie va al Padre sino por mí.
Jn. 14, 6.

Jesús Maestro camino verdad y vida, es el corazón y la luz de nuestra espiritualidad, los que rigen nuestra vida brotan de ésta luz, por tanto nos proponemos imitar, representar y vivir hoy en la Iglesia los ejemplos del Maestro por excelencia, ya que es el Hijo enviado por el Padre, para guiarnos hasta la configuración a Él. al dársenos como la Verdad plena nos revela al Padre y nos enseña a recorrer el camino haciéndose el mismo nuestro Camino y modelo. Se inclina con amor sobre nuestra fragilidad y se hace Vida nuestra, fuente de gracia, energía, fuerza espiritual y compañero de viaje en nuestro camino de cristificación.

Mariana

Los discípulos perseveraban en la oración,
con un mismo espíritu, en compañía de algunas mujeres,
y de María la madre de Jesús, y de sus hermanos.
Hch. 1, 14.

María con la advocación de Reina de los Apóstoles, la que dio y sigue dando a Jesucristo a la humanidad, en nuestra espiritualidad el P. Alberione nuestro fundador, nos la presenta como protectora, ella nos acompaña en nuestro camino de seguimiento, y en el anuncio de su Hijo.
Nos unimos a ella en el sí que ha dado a Dios, y con su ejemplo buscamos ser fieles a nuestra vocación de cercanía con Dios, en la vida comunitaria y en el apostolado, ya que así damos a Jesucristo a quienes nos rodean.
En la imagen de María como Reina de los Apóstoles está ofreciéndonos a Jesús que esta en sus brazos en actitud de predicar y bendecir. Sostiene el evangelio con su mano y nos lo da para que sea nuestra guía y luz, en él encontramos las verdaderas riquezas sobrenaturales para darlas a conocer. El mayor ejemplo que María nos da es dar a Jesús al mundo a través de nuestro apostolado, hacer que la humanidad se dirija al único Maestro, Jesucristo.

Paulina

Y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí.
Gal. 2, 20.

Reconocemos al apóstol Pablo cual intérprete y discípulo fiel del Maestro, modelo para nuestra espiritualidad. San Pablo en su vida unió santidad y apostolado, ésta experiencia Cristocéntrica-Apostólica vivida por Pablo, fascina tanto al P. Alberione nuestro fundador, que nos la propone como indispensable. Pablo permitió que Cristo habitara en él, pensara en su mente, decidiera en su voluntad, amara con su corazón, ésta es la meta que debemos alcanzar, llegar a configurarnos a Cristo como lo hizo Pablo.

El P. Alberione nos presenta a Pablo como modelo porque es humano como nosotras, con grandes cualidades y con grandes defectos, pero aún con esto se dejo alcanzar por la acción de Dios, se entrego por completo y se dejo transformar en otro Jesús vivo.

Las paulinas y los paulinos seremos dignos de éste nombre en virtud de la familiaridad que vivamos con el apóstol de las gentes, que fue el más completo y fiel interprete del divino Maestro. Llegar a configurarnos con Cristo como hizo Pablo.

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